Los molinos de papel Magnani tienen su origen en el siglo XV, cuando los primeros pobladores desarrollaron el molino a orillas del río Pescia, famoso por sus aguas cristalinas, requisito indispensable para la producción de papel.

A lo largo de los años las papeleras Magnani han caminado paso a paso con el revuelo de la nación, manteniéndose siempre activas, ya en principios del siglo XIX , como índice de su crecimiento, poseían más de 150 tinas para refinar celulosa.

El molino Magnani ya había comenzado en el siglo XVIII  exportar sus documentos en todo el mundo y podría contar entre sus clientes la mayor parte de las familias reinantes de Europa y las mentas estatales de muchos países que apreciaban la calidad de los papeles de seguridad producidos en la fábrica de máquinas de cilindros, las únicas que pueden garantizar los más altos estándares de calidad, entre los clientes de la fábrica estaba Napoleón Bonaparte que eligió la fábrica para producir un papel especial con filigrana para el anuncio de su boda con María Luisa D’Austria, el molde original aún se conserva en el molino.

La fábrica también era proveedor de la familia Crown de Italia para algunos papeles específicos y se han firmado documentos y acuerdos muy importantes sobre nuestros papeles.

Durante los años, artistas tan importantes como Picasso, De Chirico, Guttuso, Annigoni, Maccari, Bueno, Guarnieri, Morandi, escritores como D’Annunzio, Giusti y muchos otros solían producir su propio papel como signo de distinción. (texto extraído desde http://www.magnani1404.com/it/)